


Cáncer, enfermedades cardiovasculares, diabetes… las Enfermedades No Transmisibles siguen siendo la principal causa de muerte y discapacidad en el mundo. De hecho, según datos de la OMS, son responsables de la muerte de más de 41 millones de personas al año, equivalente a un total del 71% de los fallecimientos que se producen en el mundo.
Para frenar la creciente epidemia y prevenir este tipo de enfermedades, es fundamental abordar los factores de riesgo que las provocan: la OMS y el Sistema Nacional de Salud (SNS) de España ya disponen de estrategias concretas para su prevención y control, pero la reciente pandemia ha provocado que estas pasen a un segundo plano. Por ese motivo, ahora más que nunca necesitamos impulsar un cambio cultural y de hábitos a través de estrategias de comunicación efectivas en el que se priorice la prevención y el abordaje de este tipo de patologías, con el objetivo de mejorar la calidad de vida a largo plazo de la población.