La sanidad, un ámbito de retos y oportunidades

La sanidad, un ámbito de retos y oportunidades

La sanidad es, sin duda, uno de los bienes más esenciales para la inmensa mayoría de la sociedad; disponer de un buen sistema sanitario ofrece un colchón de protección que tiene una enorme importancia en el desarrollo de las políticas públicas. Las consecuencias de un buen funcionamiento del sistema sanitario van más allá de los beneficios en salud ya que aumenta las opciones para la competitividad, convirtiendo la inversión sanitaria en una inversión rentable y con múltiples retornos para el conjunto de la sociedad. Solo en España se invierten alrededor de 100.000 millones de euros al año en sanidad pública y privada, sobre todo en materia de avances farmacológicos, nuevas tecnologías de diagnóstico o de gestión, y de aplicación de la inteligencia artificial al campo de la medicina.

Retos y oportunidades para la transformación

Actualmente, este buen funcionamiento presenta numerosos retos y desafíos, lo que a su vez supone un amplio campo de oportunidades para el desarrollo de proyectos de innovación y de transformación.

En primer lugar, la necesidad de actualizar la organización de los servicios sanitarios y su relación con profesionales y pacientes, abre opciones de colaboración entre el sector público y el privado. Aquí, los fondos Next Generation encuentran un espacio para la inversión productiva que comienza a hacerse visible paulatinamente en las convocatorias en marcha, así como las que en el futuro inmediato seguirán articulándose.

En segundo lugar, asegurar la equidad y la calidad, a través del impulso de los poderes públicos con criterios de aseguramiento público universal.  En España, tras casi 4 décadas desde la promulgación de la Ley General de Sanidad de 1986, el avance del conjunto de indicadores de salud ha sido espectacular, con una importante disminución de las desigualdades y con unos niveles que nos sitúan entre los países más avanzados.

Los sucesivos barómetros sanitarios del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) y del propio sistema sanitario* han ido mostrando una valoración globalmente positiva del conjunto de la ciudadanía con respecto a la sanidad pública.

En tercer lugar, el desafío del envejecimiento poblacional que, junto a los avances científicos en el ámbito de los nuevos fármacos y las nuevas tecnologías diagnósticas, deriva en una mayor cronicidad de las patologías más prevalentes y ello conlleva nuevas necesidades de cuidados, asociados a  necesidades de apoyo social cuando se acompañan de situaciones de pérdida de autonomía personal, sea en el grado que sea. Lo sanitario y lo sociosanitario aparecen como espacios ligados que requieren coordinación y nuevos servicios.

De hecho, el espacio sociosanitario aparece como un ámbito de enorme potencial para el desarrollo de iniciativas que mejoren las respuestas a los problemas de un sector social (los mayores y las personas en situación de dependencia) cada vez más numeroso.

La inversión en sanidad en España tiene un potencial de crecimiento tanto en lo relativo a nuestro menor nivel de inversión pública que los países de nuestro entorno (un 6,6% del PIB en España, frente a 9,9% Alemania, 9,3% Francia o 8,3% Dinamarca), como en el ámbito de la sanidad privada que muestra crecimientos interanuales importantes en los últimos 10 años. **

Todos estos elementos, tanto los que tienen que ver con una situación coyuntural como los que tienen que ver con los cambios disruptivos a los que nos estamos refiriendo, generan la necesidad de articular políticas públicas renovadas y reforzadas que hagan posible una transformación paulatina de la sanidad pública hacia las necesidades de la población generando contextos más eficientes y más efectivos.

Y en esta necesidad de renovar y reforzar las políticas públicas, se hace imprescindible una apuesta por el desarrollo de una estrategia de colaboración intensa con el sector empresarial

El camino está trazado para la sanidad pública en las recomendaciones aprobadas en la Comisión de Reconstrucción del Congreso de los Diputados que en junio de 2021 definió las líneas estratégicas con un amplio consenso de los grupos parlamentarios.

Y es que el sector sanitario y las empresas que trabajan e interactúan con él tienen ante sí un camino con un gran potencial para desarrollar proyectos transformadores que requieren del máximo posible de calidad y conocimiento del contexto social, político y económico.

*https://www.sanidad.gob.es/estadEstudios/estadisticas/BarometroSanitario/home_BS.htm

**https://www.sanidad.gob.es/estadEstudios/sanidadDatos/tablas/tabla30_1.htm

José Martínez Olmos Exsecretario General de Sanidad y Senior Advisor de LLYC

José Martínez Olmos Exsecretario General de Sanidad y Senior Advisor de LLYC